martes, septiembre 21, 2010
Jerito
Me gusta Despertar, y tener una charla con Dios, Maravillosa manera de comezar un nuevo día, me gusta el día porque el cielo se va aclarando silenciosamente, lentamente saber que con ello trae cosas nuevas esperanza de vida.
Desde mi ventana puedo ver a mi Madre preparando el desayuno que no probaré en mucho tiempo con la destreza y el amor con la cual la realizaba, vaya sensación se siente como si el aroma fuese aquí en casa, como si el ruido el llamado fuera aquí.
Me gusta el día porque puedo pasar un momento mas en Machu Picchu, el antiguo poblando Inca sitios espiritual rodeado de pasado e historia nuestra, entre barro lluvia y caminos olvidados.
Desde mi ventana puedo ver a mi Madre preparando el desayuno que no probaré en mucho tiempo con la destreza y el amor con la cual la realizaba, vaya sensación se siente como si el aroma fuese aquí en casa, como si el ruido el llamado fuera aquí.
Me gusta el día porque puedo pasar un momento mas en Machu Picchu, el antiguo poblando Inca sitios espiritual rodeado de pasado e historia nuestra, entre barro lluvia y caminos olvidados.
Me gusta el día porque en el me hace viajar a lugares inexplicables, Víctor Fajardo en ayacucho donde la gente vive la emoción y el extasis al ritmo del Pumpín un estilo de música tradicional autóctono del lugar con su máximo exponente Waylla ichu tomando las calles las plaza, con vestidos multicolores y maravillosas comparsas una alegría desbordante.
Me gusta abrir los ojos y perderme en el bosque de piedra de Huayllay en la región Pasco enormes piedras y rocas erosionadas de hace 70 millones de años de antigüedad. Rocas detalladamente dibujadas por manos de Dios y la puesta de sol hace un juego maravilloso.
Me gusta caminar y llegar donde se encuentran los Uros en Puno un conjunto de islas de totora que crece en sitios pantanosos, donde el frio entumece las piernas donde las mejillas experimentan un cambio de arrugas prematuras, esperar la tibieza del Sol en absoluto silencio. Sentarme cerca de la orilla con el deseo de observar el perpetuo romance entre las esbeltas balsas de totora y las aguas azul profundo de ese lago legendario que humedece el altiplano.
Me gusta el día y la ciudad porque en el se escribe las mas preciosas novelas, que hay en el, un sin fin de personajes con rumbos distintos y que todo ello hace un resumen de la humanidad donde se mezcla culturas creencias razas colores y que todos formamos parte de este pequeño país que llamamos tierra, lo maravilloso de todo Dios esta detrás de todo por ello todo es perfecto.
Me gusta caminar y llegar donde se encuentran los Uros en Puno un conjunto de islas de totora que crece en sitios pantanosos, donde el frio entumece las piernas donde las mejillas experimentan un cambio de arrugas prematuras, esperar la tibieza del Sol en absoluto silencio. Sentarme cerca de la orilla con el deseo de observar el perpetuo romance entre las esbeltas balsas de totora y las aguas azul profundo de ese lago legendario que humedece el altiplano.
Me gusta el día y la ciudad porque en el se escribe las mas preciosas novelas, que hay en el, un sin fin de personajes con rumbos distintos y que todo ello hace un resumen de la humanidad donde se mezcla culturas creencias razas colores y que todos formamos parte de este pequeño país que llamamos tierra, lo maravilloso de todo Dios esta detrás de todo por ello todo es perfecto.
1 comentarios:
me parece q tines futuro como escritor enserio me iso pensar todo q escribistes en lo bonito q es nuestro pais teniendo tantas maravillas el estar vivo un dia mas el despertar es lo mejor q nos puede pasar el tener a lguien q nos quiera q nos espere a nuestra llegada es lo mas hermoso.
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